Al menos 11 muertos en accidente aéreo.

En la tarde de ayer el vuelo 2976 de la compañía UPS que se dirigía a Honolulu, Hawai se precipitó a tierra poco después de despegar del Aeropuerto Internacional de Louisville Mohammed Ali en Kentucky. Alrededor de las 5:15 p.m. hora local el avión inició su carrera de despegue llegando a alcanzar una altura máxima de 175 pies antes de estrellarse con edificaciones cerca del aeropuerto, afectando negocios y residencias cerca del lugar. El alcalde Craig Greenberg, le dijo a los periodistas el miércoles que unos 135 clientes seguían sin electricidad.

Vuelo 2976 de UPS despegando.

El avión, un MD-11F matrícula N259UP y de acuerdo con récords oficiales de la Agencia Federal de Aviación (FAA) contaba al momento del accidente con 34 años de explotación. Según distintos medios el avión cargaba al momento del impacto con unos 144,000 litros de combustible, suficientes para completar el viaje de unos 6920 km hasta Honolulu. El accidente provocó un despliegue inmediato de los servicios de emergencias y el cierre temporal del aeropuerto. Las autoridades ordenaron a la población de la zona a mantenerse dentro de sus hogares y negocios hasta nuevo aviso por miedo a que se pudiesen provocar más explosiones. El accidente ha dejado un saldo de 11 muertos y varios heridos. Aún no se sabe que carga se trasladaba, pero las autoridades no han dicho nada referente a alguna carga peligrosa o contaminante.

Momento en el que el avión impacta contra el terreno

En un comunicado, UPS informó que paraba momentáneamente las operaciones de paquetería en World Port y que estaba cooperando con las autoridades federales para establecer las causas del accidente. Por su parte, la FAA y la NTSB han confirmado que se encuentran en el lugar para realizar una investigación exhaustiva para esclarecer este hecho. Boeing también ha dicho en una publicación en redes sociales que se encuentra cooperando con las autoridades y que están listo para ayudar en caso de ser necesario.

Las autoridades de la FAA y la NTSB han señalado que la investigación podría tardar varios meses e incluso años en completarse, dado que se analizarán tanto las grabaciones de vuelo como los registros de mantenimiento de la aeronave y otros factores que puedan haber contribuido al siniestro. Hasta entonces, no se descarta ninguna causa posible, incluidas fallas mecánicas o errores operativos.